Sexo: el arte del juego previo

Los “rapiditos” han salvado las relaciones sexuales de muchas parejas, después de todo la vida actual no siempre permite dedicarle todo el tiempo que deseamos a la sexualidad. Sin embargo, aquellas parejas que han abandonado por completo el juego previo están perdiéndose mucho.

¿Por qué es importante el juego previo? 

Las parejas que no practican juego previo se están afanando y perdiendo la mitad de la diversión del sexo en general. Según la doctora Debby Herbenick, directora asociada del Centro de Promoción de Salud Sexual de la Universidad de Indiana, cuando la mujer se excita “los músculos del útero se contraen, dando más espacio en la vagina, haciendo que el sexo sea más placentero y cómodo”.

El juego previo también hace que la mujer lubrique naturalmente, lo cual ayuda a que el hombre mantenga la erección. La lubricación permite a ambas partes alcanzar el orgasmo con mayor facilidad.

El juego previo también acerca a las parejas, haciendo que su relación íntima y en general mejore. Crear una conexión emocional ayuda a que ambas personas sean más felices dentro y fuera de la cama.

¿Qué hacer?

Realmente no hay una forma correcta o incorrecta de explorar con el juego previo. Dependerá mucho de la imaginación de ambos, de qué tan abiertos estén a explorar y de qué les gusta.

Sexo: el arte del juego previo

 

Hablar “sucio”- El lenguaje romántico es muy lindo, pero el atrevido funciona de maravillas en la cama. Permítanse explorar el lenguaje verbal como alternativa de excitación.

Juntarse- Cualquier acto que implique contacto (acariciarse, bailar, compartir o darse un baño) es una muy buena manera de comenzar un encuentro sexual.

Tocarse- Recorrer la cara de tu pareja con tus dedos, acariciar su cabello y hasta hacerse cosquillas es una excelente manera de relajarse.