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Sonrisa blanca, corazón contento

Una sonrisa dice más que mil palabras y lo menos que quieres es que tu sonrisa hable mal de ti. Dentro de los mejores atributos que podemos tener es una dentadura blanca que nos permita sonreírle seductivamente al hombre que nos gusta, reírnos a carcajadas con nuestras amigas y compartir nuestro positivismo con el mundo.

  • Sigue las reglas básicas de higiene: Cepíllate los dientes dos veces al día y utiliza la seda dental diariamente para remover la placa. Que la pereza no sea una excusa para no cepillarte, puedes utilizar cepillos eléctricos como los de Oral-B.
  • Evita las bebidas oscuras: El café, el vino tinto, el jugo de arándano y las sodas oscuras te manchan los dientes. Evítalas siempre que te sea posible. Si decides consumirlas, usa un pitillo para evitar al máximo el contacto con los dientes y si puedes, cepíllate la dentadura.
  • Dile adiós al cigarrillo: Además de los evidentes problemas de salud que conlleva fumar, este hábito genera un terrible aliento y manchas en tus dientes.
  • Bebe agua: Dentro de los grandes beneficios que tiene beber agua está el hecho de que mantiene los dientes blancos. Si no puedes cepillarte los dientes después de cada comida, enjuágate la boca con un poco de agua.
  • “Detergentes” naturales: Comer alimentos como manzanas, zanahorias, apio y fresas ayuda a mantener una sonrisa más blanca y saludable
  •  Los extras: Aplicar un poco de bicarbonato de sodio o unas gotas de limón sobre tu pasta de dientes una vez al día contribuye a mantener una sonrisa limpia y brillante.

 

 
 
 
 
 
 
 

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