
9 tips para llevarse bien con la suegra y no morir en el intento
Convéncete, cuando te casas con el hombre que amas, no solamente lo haces con él, sino también con toda su familia. ¡El combo es completo! Y ahí es donde muchas inician constantes batallas con sus suegras porque estas desean mantener protagonismo dentro del matrimonio o relación de sus hijos, comportamiento que no apruebas. Y entonces, ¿qué debo hacer para llevarme bien con ella y no morir en el intento?
1. No debatas con ella respecto a las reglas de su casa: No pierdas energía ni mucho tiempo en tratar de cambiar las normas de su propia casa porque al final es eso, su casa. Aunque no las apruebes, es prácticamente un hecho que tienes que respetarlas, por ejemplo, llegar a tiempo a la cena, dejar que le prepare el plato favorito a su hijo aunque esté a dieta o hasta evitar que él lave los platos luego de la cena, tal y como lo hace cuando está contigo. Es más, permítete preguntarle si necesita ayuda en algo. No se trata de que ella se aproveche de tu gentileza, pero que sí note tu interés por ayudarla y que la carga no sea solo de ella.
2. Que todo lo que diga no te afecte: En tu convivencia con ella dirá comentarios que seguramente los tomarás como personales, pero no entres en su juego para demostrarle quién es la mejor. Tu objetivo es llevar la “fiesta” en paz con educación, respeto y armonía.
El portal La Familia habla sobre la necesidad de que es inevitable tener una relación con tu suegra. Es necesario -de ambas partes- cuidar las palabras, las discusiones acaloradas, las miradas y hasta las preguntas o respuestas pasadas de tono. Ten en cuenta que cuando hieres a tu suegra o suegro, de alguna forma le causas daño a tu pareja.
3. No le des razones para que te critique: Decide que tu vestido rojo y provocativo lo llevarás puesto durante una salida de viernes con tu chico y no a su casa, o que no llegarás a casa luego de las 10 p.m. a menos que sea por trabajo, pero nunca dejes de ser tú.
4. Pídele a tu pareja que las discusiones sean de dos y no de tres: Qué manía tienen los hombres de contarle todo a su madre. Si es tu caso, hazle saber que lo único que gana confesando los problemas que hay en su casa es que crea que la “mala” de la película eres tú. Las diferencias entre las parejas se arreglan entre dos y nunca entre tres, menos si esa tercera es la suegra. En un matrimonio o relación de pareja tienen que existir límites y no tiene que existir intromisión de tu suegra. Si él lo cumple, su relación con ella será más cordial.
5. Conviértela en tu amiga: Invítala a tomar un café de vez en cuando, a ir de compras juntas o incluso a preparar el postre favorito de tu pareja en tu casa. Trabajar la relación hará que ella se sienta involucrada y que la veas como una amiga y no como una rival, pues al final ambas tienen un interés en común: su hijo.
6. No compitas con tu suegra: Si lo haces, solamente aumentarás la mala percepción entre ambas y por ende la relación con él se volverá más tensa. Si él te eligió como su pareja, es porque te ama y admira así como eres. No necesitas adoptar la forma de su mamá.
7. No entres en batallas cruzadas: Este consejo está vinculado directamente con la relación que llevas con tu pareja más que con tu suegra. Muchas veces se entra en una batalla campal de críticas cruzadas en la que ambos se dicen comentarios negativos de sus familias para balancear la tensión u ofensas recibidas, pero lo único que logran entre sí es distanciarse y herirse.
8. Conviértete en amiga de tu suegro: Si lo tienes, haz que sea un aliado. Seguramente es menos celoso y conflictivo que ella. Si le caes bien, estamos seguras de que sabrá cómo arreglárselas para hacerle entender a tu suegra que eres una mujer maravillosa que ama a su hijo y que lo hace muy feliz.
9. Ponle límites: Con empatía y respeto, pero hazlo. Por ejemplo, si tu suegra desea visitarte un sábado pero ya tienes planes, no te sientas comprometida. Hazle saber que ese día tienen actividades y que si no es ese día, puede ser el siguiente. No se tiene por qué sentir aludida, ni mucho menos pensar que no la quieres recibir.
Un viejo refrán dice: “El que se casa, quiere casa” y va más allá de que resulte peyorativo en una relación con la suegra u otro familiar, pues comenzar solos en un nuevo hogar es más satisfactorio, pasional y saludable para la pareja.
¿Y tu consejo para llevarte bien con tu suegra cuál es? ¡Queremos saberlo!
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